Juan Manuel Cicuéndez Ortega fue un dibujante de cómic e ilustrador, natural de Toledo, más conocido por el seudónimo Cic. Descubrió su pasión como dibujante muy joven lo que le llevó a debutar antes de la mayoría de edad. De esta manera, se ha convertido en una importante figura del cómic no solo en España sino también en otros países europeos, destacando su labor en revistas como Spirou y Tintín. Para saber más sigue leyendo tras el salto de página.
Primeros pasos
Juan Manuel Cicuéndez nace en Toledo en 1939. Comienza su formación en la ciudad que lo vio nacer y a los 16 años se traslada a Madrid con la intención de realizar estudios técnicos. No obstante, Cicuéndez sabía bien lo que quería: dibujar. Esto no debió sentar especialmente bien a sus padres, al fin y al cabo todo padre siempre quiere para sus hijos "lo mejor" o lo que ellos creen mejor.
De igual manera, si algo se quiere hay que intentarlo las veces que haga falta para conseguirlo y eso fue lo que hizo Juan Manuel Cicuéndez. Así, publica su primera historieta en la revista Clarín con tan solo 17 años. Pocos años después, publica de manera regular sus historietas en la revista 3 Amigos, aunque destaca sobre todo su colaboración con la editorial Ferma de Barcelona, para la que estuvo trabajando bastante tiempo.
La época de Spirou
A partir de 1965 comienza a trabajar en otros países como Reino Unido y Bélgica. Realizó cuadernos de guerra y trabajó para varias revistas con sello inglés como Hostpur, Eagle, etc. No obstante, de su labor fuera de España destaca, sobre todo, la realizada en Bélgica para la agencia Word Presse. Es en este momento cuando comienza su colaboración con la revista Spirou.
Spirou es una revista de historietas creada por el editor Jean Dupuis hacia 1938 para ser publicada en Bélgica y Francia. Entre las series más famosas de esta revista cabe destacar Lucky Luke, Spirou y Los Pitufos. Cic, una vez firma contrato con el editor, comienza a colaborar en una serie de narraciones cortas sobre hechos históricos, Les Histories de l'oncle Paul, y en la historieta del oeste, Les Trafiquans d'Ébène, junto a J.L Fernan. Sus trabajos con Spirou comienzan hacia 1968 y seguirá con ellos hasta 1976.
Es en este momento cuando el autor desarrolla al máximo su técnica. Fue un trabajo donde adquirió gran experiencia y muchos conocimientos de todo tipo, sobre todo, de historia.
Después de 1976: nuevos trabajos para revistas españolas.
En 1976 publica La Estampida del Oro para la revista española El Acordeón. En este caso, Cic da vida al guión de LACASA (Juan Bautista Lacasa Nebot). Se trata de una serie de historietas del Oeste con un total de 31 episodios.
No obstante, en esta época tuvo mayor repercusión la serie Los Mayas, publicada en la revista Piñon. Los Mayas es una serie de historietas a cerca de la tribu que da nombre a la obra. En este caso, vuelve a trabajar con J.L Fernán (Los traficantes de Ébano) y llegará a tener un alcance internacional. Hacia 1980 se publicará en francés y flamenco por Spirou y, posteriormente, fue editada en otros países europeos como Turquía. En España, llegó a serializarse incluso en otra revista, Mortadelo, y finalmente, se recopiló en un sólo tomo por la editorial Everest en 1987.
Tintín
A partir del año 1978 comienza a trabajar para Tintín, revista de origen belga nacida hacia 1946. Tintín fue una "revista para jóvenes entre 7 y 77 años" tal y como decía el subtitulo que la acompañaba. El nombre de la publicación fue tomado por su cómic más famoso, Tintín, el clásico personaje de Hergé que hoy en día es imprescindible en el mundo del cómic.
Juan Manuel trabajó, en este caso, junto a Y. Duval en las historietas Le Chavalier Noir y Les Mercenaires du Ciel. Obras que fueron publicadas en España tiempo después por la editorial Nueva Frontera.
A partir de 1980 dedica parte de su trabajo a la ilustración puesto que las revistas de historietas comienzan a tambalearse en estos momentos. No obstante, Cicuéndez continúa trabajando para Tintín hasta 1983.
Tim Taylor: un clásico de la historieta del Oeste
Entre 1987 y 1989 comienza a trabajar en el que se convertiría en uno de sus mejores cómics sobre western. Con guión del escritor madrileño Alfredo Gómez Cerdá, da vida a Tim Taylor para la revista Rodeo de Éditions Lug. La serie fue recopilada en un total de 9 capítulos con 69 páginas cada uno.
Los 90: cambio de rumbo
Aunque conserva su estilo propio, Juan Manuel Cicuéndez, toma un nuevo rumbo en sus obras en la década de los 90. Comienza a firmar con el seudónimo por el que se le conoce hoy día, Cic, y dejará a un lado las historias del oeste para centrarse en temas aeronáuticos. En esta etapa trata temas sobre la aeronáutica española en concreto y cada una de sus épocas, que se recopilaron en una colección de álbumes para el Museo del Aire con el título Imágenes de la Aeronáutica Española.
No obstante, esta no es la primera vez que el autor dedica su destreza a los aviones. En otras ocasiones, algunas de sus obras ya presentaban ambientes aeronáuticos y aventuras aéreas como Les Aventuriers du Ciel o Les Mercenaires du Ciel, entre otras.
Las obras más importantes de este período son Guerra aérea sobre el Marruecos español (1913 - 1927), En busca de la aventura aérea (1926-1936) y Nuestros pioneros (...-1913). Guerra aérea sobre el Marruecos Español (1913 - 1927) es una obra que realiza junto a Ángel Flores Alonso y muestra la situación de Marruecos a finales de 1913 y el recién creado Servicio de Aeronáutica Militar, entre otras cosas.
Por otra parte, En busca de la aventura aérea (1926 - 1936) cuenta de nuevo con el guión de Alfredo Gómez Cerdá y ambos nos cuentan la situación de la industria aeronáutica en España a partir de 1926. Por último, Nuestros Pioneros, con guión de Ángel Flores nuevamente, dedica especial interés a los globos dirigidos y al aeropuerto de Cuatro Vientos.
Además, cabe destacar varias historias cortas que realizó para la revista Aeroplano y las ilustraciones que realizó entre 1995 y 1997 sobre Efemérides Aeronáuticas para la revista Aeronáutica y Astronáutica del Ejército del Aire. También, publicó un álbum sobre historia, arte y arquitectura de Castilla - La Mancha en esta época, Castilla - La Mancha, una Aventura, historieta de 100 páginas con guión de Ángel Flores y Antonio Pereira.
El nuevo siglo
A partir del año 2000 continúa en su faceta de ilustrador, pero realiza alguna historieta como Don Bosco, Nuestro Amigo (2001) para la editorial CCS, El Chatarrero de Dios (2002) y Eugenio de Mazenod "Corazón de fuego" (2005), obra realizada con guión de Antonio Pereira y que cuenta la vida del sacerdote que da nombre al cómic. Este último fue publicado en 2007 en Alemania, Austria y República Checa. Aunque su éxito fue tal, que en 2010 llegó a editarse en Rusia y en 2011 en Polonia.
Conclusión
Recientemente, se conoció la noticia del fallecimiento de Juan Manuel Cicuéndez que fue el pasado 7 de septiembre con 74 años. No obstante, sus esfuerzos por continuar formándose en lo que de verdad quería, su estilo clásico que encandiló a las más grandes del cómic franco-belga y su temática variada, han hecho que Cic siga presente por siempre en todos aquellos que aman el noveno arte.
Fuente: Página oficial Juan Manuel Cicuéndez, Entrecomics, Tebeosfera
Primeros pasos
Juan Manuel Cicuéndez nace en Toledo en 1939. Comienza su formación en la ciudad que lo vio nacer y a los 16 años se traslada a Madrid con la intención de realizar estudios técnicos. No obstante, Cicuéndez sabía bien lo que quería: dibujar. Esto no debió sentar especialmente bien a sus padres, al fin y al cabo todo padre siempre quiere para sus hijos "lo mejor" o lo que ellos creen mejor.
De igual manera, si algo se quiere hay que intentarlo las veces que haga falta para conseguirlo y eso fue lo que hizo Juan Manuel Cicuéndez. Así, publica su primera historieta en la revista Clarín con tan solo 17 años. Pocos años después, publica de manera regular sus historietas en la revista 3 Amigos, aunque destaca sobre todo su colaboración con la editorial Ferma de Barcelona, para la que estuvo trabajando bastante tiempo.
La época de Spirou
A partir de 1965 comienza a trabajar en otros países como Reino Unido y Bélgica. Realizó cuadernos de guerra y trabajó para varias revistas con sello inglés como Hostpur, Eagle, etc. No obstante, de su labor fuera de España destaca, sobre todo, la realizada en Bélgica para la agencia Word Presse. Es en este momento cuando comienza su colaboración con la revista Spirou.
Spirou es una revista de historietas creada por el editor Jean Dupuis hacia 1938 para ser publicada en Bélgica y Francia. Entre las series más famosas de esta revista cabe destacar Lucky Luke, Spirou y Los Pitufos. Cic, una vez firma contrato con el editor, comienza a colaborar en una serie de narraciones cortas sobre hechos históricos, Les Histories de l'oncle Paul, y en la historieta del oeste, Les Trafiquans d'Ébène, junto a J.L Fernan. Sus trabajos con Spirou comienzan hacia 1968 y seguirá con ellos hasta 1976.
Es en este momento cuando el autor desarrolla al máximo su técnica. Fue un trabajo donde adquirió gran experiencia y muchos conocimientos de todo tipo, sobre todo, de historia.
Después de 1976: nuevos trabajos para revistas españolas.
En 1976 publica La Estampida del Oro para la revista española El Acordeón. En este caso, Cic da vida al guión de LACASA (Juan Bautista Lacasa Nebot). Se trata de una serie de historietas del Oeste con un total de 31 episodios.
No obstante, en esta época tuvo mayor repercusión la serie Los Mayas, publicada en la revista Piñon. Los Mayas es una serie de historietas a cerca de la tribu que da nombre a la obra. En este caso, vuelve a trabajar con J.L Fernán (Los traficantes de Ébano) y llegará a tener un alcance internacional. Hacia 1980 se publicará en francés y flamenco por Spirou y, posteriormente, fue editada en otros países europeos como Turquía. En España, llegó a serializarse incluso en otra revista, Mortadelo, y finalmente, se recopiló en un sólo tomo por la editorial Everest en 1987.
A partir del año 1978 comienza a trabajar para Tintín, revista de origen belga nacida hacia 1946. Tintín fue una "revista para jóvenes entre 7 y 77 años" tal y como decía el subtitulo que la acompañaba. El nombre de la publicación fue tomado por su cómic más famoso, Tintín, el clásico personaje de Hergé que hoy en día es imprescindible en el mundo del cómic.
Juan Manuel trabajó, en este caso, junto a Y. Duval en las historietas Le Chavalier Noir y Les Mercenaires du Ciel. Obras que fueron publicadas en España tiempo después por la editorial Nueva Frontera.
A partir de 1980 dedica parte de su trabajo a la ilustración puesto que las revistas de historietas comienzan a tambalearse en estos momentos. No obstante, Cicuéndez continúa trabajando para Tintín hasta 1983.
Tim Taylor: un clásico de la historieta del Oeste
Entre 1987 y 1989 comienza a trabajar en el que se convertiría en uno de sus mejores cómics sobre western. Con guión del escritor madrileño Alfredo Gómez Cerdá, da vida a Tim Taylor para la revista Rodeo de Éditions Lug. La serie fue recopilada en un total de 9 capítulos con 69 páginas cada uno.
Los 90: cambio de rumbo
Aunque conserva su estilo propio, Juan Manuel Cicuéndez, toma un nuevo rumbo en sus obras en la década de los 90. Comienza a firmar con el seudónimo por el que se le conoce hoy día, Cic, y dejará a un lado las historias del oeste para centrarse en temas aeronáuticos. En esta etapa trata temas sobre la aeronáutica española en concreto y cada una de sus épocas, que se recopilaron en una colección de álbumes para el Museo del Aire con el título Imágenes de la Aeronáutica Española.
No obstante, esta no es la primera vez que el autor dedica su destreza a los aviones. En otras ocasiones, algunas de sus obras ya presentaban ambientes aeronáuticos y aventuras aéreas como Les Aventuriers du Ciel o Les Mercenaires du Ciel, entre otras.
Las obras más importantes de este período son Guerra aérea sobre el Marruecos español (1913 - 1927), En busca de la aventura aérea (1926-1936) y Nuestros pioneros (...-1913). Guerra aérea sobre el Marruecos Español (1913 - 1927) es una obra que realiza junto a Ángel Flores Alonso y muestra la situación de Marruecos a finales de 1913 y el recién creado Servicio de Aeronáutica Militar, entre otras cosas.
Por otra parte, En busca de la aventura aérea (1926 - 1936) cuenta de nuevo con el guión de Alfredo Gómez Cerdá y ambos nos cuentan la situación de la industria aeronáutica en España a partir de 1926. Por último, Nuestros Pioneros, con guión de Ángel Flores nuevamente, dedica especial interés a los globos dirigidos y al aeropuerto de Cuatro Vientos.
Además, cabe destacar varias historias cortas que realizó para la revista Aeroplano y las ilustraciones que realizó entre 1995 y 1997 sobre Efemérides Aeronáuticas para la revista Aeronáutica y Astronáutica del Ejército del Aire. También, publicó un álbum sobre historia, arte y arquitectura de Castilla - La Mancha en esta época, Castilla - La Mancha, una Aventura, historieta de 100 páginas con guión de Ángel Flores y Antonio Pereira.
El nuevo siglo
A partir del año 2000 continúa en su faceta de ilustrador, pero realiza alguna historieta como Don Bosco, Nuestro Amigo (2001) para la editorial CCS, El Chatarrero de Dios (2002) y Eugenio de Mazenod "Corazón de fuego" (2005), obra realizada con guión de Antonio Pereira y que cuenta la vida del sacerdote que da nombre al cómic. Este último fue publicado en 2007 en Alemania, Austria y República Checa. Aunque su éxito fue tal, que en 2010 llegó a editarse en Rusia y en 2011 en Polonia.
Conclusión
Recientemente, se conoció la noticia del fallecimiento de Juan Manuel Cicuéndez que fue el pasado 7 de septiembre con 74 años. No obstante, sus esfuerzos por continuar formándose en lo que de verdad quería, su estilo clásico que encandiló a las más grandes del cómic franco-belga y su temática variada, han hecho que Cic siga presente por siempre en todos aquellos que aman el noveno arte.
Fuente: Página oficial Juan Manuel Cicuéndez, Entrecomics, Tebeosfera
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